Museo del traje.

La ropa es sinónimo de poder y de estatus desde que vestirnos dejó de ser una mera cuestión de supervivencia y protección contra el frío.

 

En la antigua Roma había colores reservados a ciertas clases sociales. Como el purpura, que solo podía ser llevado por los magistrados.

Las doncellas medievales se cubrían la melena cuando contraían matrimonio.

 

 La cuestión de como y cuando quitarse los guantes trajo de cabeza durante siglos a las cortes de Francia.

 

María Antonieta arruinó a su país con su estrafalario gusto por lo ostentoso y por ende, caro.

Que la mujer llevara pantalones supuso una revolución social y una declaración de intenciones.

Coco Chanel popularizó los collares infinitos de perlas, a menudo falsas. 

La moda es un asunto fascinante y aveces incluso algo turbio. Trastornos de alimentación por culpa de imposibles ideales de belleza, explotación de personas para conseguir precios competitivos, espionaje en el sector entre casas de moda...

La moda está relacionada con la historia y es un fiel reflejo de las sociedades para las que fue concebida.

Por eso, después de esta introducción os presento mi propuesta, un museo imprescindible, curioso y recién renovado. Hablo del Museo del Traje de Madrid.

Dicho museo ofrece una visión general e íntima de la moda española desde la Edad Media hasta nuestros días.

 En un dinámico recorrido a trav través de un edificio de vanguardia, seremos testigos de como evolucionaron las siluetas y los tejidos.

Horario:

Martes a sábado
09:30 - 19:00 h.

Domingos y festivos
10:00 - 15:00 h.

Tarifa:

General: 3€