Existen numerosas costumbres para atraer la buena suerte y no deja de ser curioso que casi todas tengan en común que se tira algo viejo para empezar con buen pie una nueva etapa de la vida. Los chinos lo hacen, en la noche de San Juan se queman apuntes y muebles viejos, los italianos desfenetran platos y vajillas por año nuevo...
A veces, el acto de desprendernos de trocitos de nuestro pasado nos obliga a mirar con retrospectiva y darnos cuenta de como hemos crecido y cambiado.
Este ejercicio de limpieza y crecimiento interno debería hacerse una vez al año, pero por diversos motivos lo he ido postponiendo cada vez más hasta que solo vi viable desprenderme de toda una habitación para creer de golpe y analizar cada estrato de mi vida.
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Caballitos de Tenerife |
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Vista frontal |
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La utilidad de un cuenco |
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Detalle colcha |
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